
Con el descaro más infame que puede tener una persona, Roosevelt Hernández se ha atrevido a ofender a los hondureños, al exigir a los miembros del CNE que le sean transmitidos los resultados de la elección presidencial, lo cual es una intromisión brutal e inaceptable. Al hacer la descabellada solicitud, Roosevelt Hernández adopta la típica pose populista de convertirse en controlador del acto cívico más independiente de los ciudadanos como es el ejercicio electoral. Roosevelt Hernández, aunque enfundado en el uniforme militar, que ya no honra, actúa igual que lo han venido haciendo los militares chavistas venezolanos.
La pretensión de Roosevelt Hernández, de querer controlar la elección presidencial, no es un simple acto abusivo, es parte del plan con que el PLR pretende amañar las elecciones el 30 de noviembre, de mil maneras. Las FFAA quedaron descalificadas desde el 9 de marzo, de participar en las elecciones generales, su presencia no genera ninguna confianza en las elecciones, todo lo contrario, cualquier tarea que se les asigne a los militares, merecerá la desconfianza de los hondureños. El 9 de marzo, Roosevelt y su alto mando militar, actuando como parte interesada al servicio del gobierno y del PLR, fueron cómplices de un boicot planeado para retrasar la entrega de las urnas para hacer que los electores se retiraran de su centro sin ejercer el sufragio. Los electores se resistieron y esperaron las urnas hasta por 14 horas hasta que cumplieron con su derecho.
Hoy, los números que han obtenido las encuestadoras encuentran a la candidata del PLR, Rixi Moncada, por los suelos, su apoyo es estruendosamente raquítico, está a una distancia kilométrica en materia electoral, que no le permite ganar la elección, ni aun catapultada por un mecanismo grueso de fraude. Pero, en LIBRE, las ultimas esperanzas de permanecer en el poder están cifradas en el fraude, para el que cuentan con la asesoría de venezolanos, mexicanos, un costarricense y otros extranjeros. Dentro del contexto de fraude está el método de disuadir o desestimular a los electores de muchas maneras, para que no acudan a las urnas. Gente con experiencia advierte que el líder de LIBRE tiene planeado una estrategia de varias acciones para provocar el caos, días antes y el propio día de las elecciones. Todo esto lo deben saber los hondureños, porque de nosotros depende, que respondamos con valentía para no dejarnos intimidar y armarnos de coraje y valor para salir a votar, llueve, truene o relampaguee.
Lo último que faltaba era que, Roosevelt Hernández terminará de enlodar a las FFAA al ponerlas como una institución meretriz, dispuesta a sacrificar el futuro de sus miembros, convertidos los militares en una especie de servidumbre al servicio del PLR, actuando como un puente desgraciado por donde el chavismo pueda caminar en procura de la destrucción de la democracia. La vileza con que ha actuado Roosevelt Hernández, al exaltar la convocatoria de una Constituyente, además de exponerlo como traidor a la Patria, lo exhibe sin una pizca de duda, como un militar comprometido con el «Cartel de los Soles». Los militares hondureños deben ponerse en alerta: con Roosevelt Hernández el futuro de las FFAA es incierto, porque si llegara a triunfar la candidata Rixi Moncada mediante el mecanismo de fraude, las FFAA pueden ser convertidas en un ejército popular, como ha acontecido en los países donde se han instaurado gobiernos populistas socialistas.
Roosevelt Hernández es una amenaza para la democracia, es un peligro para Honduras, y como tal, es una amenaza y un peligro también contra las FFAA, porque ha demostrado que sus ambiciones y sus compromisos personales están por encima de los intereses de Honduras, y porque es visible que sus actuaciones plegadas al partido PLR, socio del «Cartel de los Soles», lo vinculan a esta organización desde el momento en que acudió a una cita con el líder militar del «Cartel de los Soles», Vladimir Padrino López.
Afortunadamente, los hondureños tenemos fe que las consejeras Ana Paola Hall y Cossette López en el CNE, le darán un no rotundo a la descerebrada pretensión de Roosevelt Hernández, de tener acceso a los resultados de la elección presidencial. Y con profunda satisfacción y complacencia, vemos que todos los sectores del país, incluso la UNAH, de la que aún tenemos dudas justificadas, se están pronunciando en contra de la malvada pretensión de Roosevelt Hernández, completamente fuera de orden, de tener acceso a las actas electorales del nivel presidencial. Esta coalición espontanea que ha hecho que los sectores del país se pronuncien contra la descarada petición de Roosevelt Hernández, la podremos ver también el día de las elecciones, cuando los electores decidan votar por el candidato que hasta ahora no muestra señales de contaminación por el narcotráfico y la corrupción.
Así son las cosas y así se las hemos contado hoy lunes 27 de octubre de 2025.
