
Tras 22 días de protestas, las enfermeras auxiliares de Honduras y la Secretaría de Salud (Sesal) alcanzaron acuerdos este lunes, logrando la suspensión de las asambleas informativas, según anunció la viceministra de Salud, Nerza Paz.
Las negociaciones, que abordaron 14 puntos, culminaron en la firma de dos actas de compromiso, una para suspender represalias contra las manifestantes y otra para el resto de los acuerdos, permitiendo la reanudación de las atenciones médicas a partir del turno de la tarde en los 18 departamentos del país. Paz destacó que, “gracias a Dios”, el sistema sanitario retorna a la normalidad tras semanas de interrupciones que dejaron a miles de pacientes sin atención.
El presidente de la Asociación Nacional de Enfermeras y Enfermeros Auxiliares de Honduras (ANEEAH), Josué Orellana, confirmó que las enfermeras se reincorporarán de inmediato a sus labores, pero advirtió que retomarán las protestas si las autoridades incumplen los compromisos.
Aunque evitó detallar los acuerdos, ya que fueron negociados por una comisión de la que no formó parte, Orellana resaltó que se lograron consensos en todos los puntos, incluyendo el sensible tema de las represalias, gracias al apoyo popular. Este avance llega en un contexto de tensiones sociales y desafíos climáticos, con alertas verdes vigentes por lluvias en varias regiones, mientras Honduras se prepara para las elecciones generales del 30 de noviembre.