El expresidente Manuel Zelaya respondió con indignación al informe presentado por el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), titulado «redes estratégicas de concentración de poder», el cual señala la presencia de varias familias, incluyendo la suya, en posiciones clave dentro del gobierno hondureño. Zelaya calificó el informe como un «ataque inmerecido», defendiendo que su familia ha dedicado parte de su vida a actividades que respaldan al pueblo hondureño.
En sus declaraciones, el exmandatario afirmó que las acusaciones del CNA no tienen fundamento y buscan desacreditar injustamente tanto a su familia como a otras mencionadas en el informe. Zelaya insistió en la transparencia de las acciones de su familia y rechazó las insinuaciones de influencia indebida en el gobierno, subrayando su compromiso con los intereses del pueblo durante su trayectoria pública.