El expolicía Mauricio Hernández Pineda está a la espera de sentencia en Estados Unidos tras declararse culpable en febrero de delitos relacionados con el narcotráfico. Antes de ese momento crítico, Hernández Pineda escribió al juez Kevin Castel el 10 de junio, expresando su profundo pesar y aceptando plena responsabilidad por sus acciones. En la carta, detalló el impacto mental que enfrentó, incluidas las recientes muertes de su madre en octubre de 2023 y de su hermano en marzo de 2021, acontecimientos que no pudo afrontar debido a su encarcelamiento. Además, destacó el deterioro de su salud debido a varias enfermedades y dos casos graves de COVID-19, que, según dijo, casi le quitan la vida y que todavía lo afectan.
Hernández Pineda compartió con el juez las actividades que ha realizado como parte de su proceso de rehabilitación en prisión, entre ellas: B. lecciones de español, mucha lectura, aprendizaje de inglés, asistencia a cursos educativos y liderazgo de un grupo cristiano como consultor. También destacó su proyecto de montar una granja avícola una vez recupere su libertad, basado en su experiencia y su deseo de contribuir positivamente a la sociedad y a su familia.
En su carta, Hernández Pineda reiteró su firme voluntad de corregir sus errores y destacó que su vida hasta el momento se ha caracterizado por un trabajo honesto y constructivo. Expresó su profundo pesar y pidió al juez Castells que tenga en cuenta estos aspectos a la hora de determinar la pena y que se asegure de no volver a incurrir en actos delictivos que afecten a Estados Unidos.