OBEDIENCIA DEBIDA NO ES OBEDIENCIA CIEGA

No quisiera ser alarmista, pero no me resisto a subrayar algunas declaraciones del nuevo jefe del Estado Mayor Conjunto de las FFAA, Gral. Roosevelt Hernández, que en principio aparenta ser un oficial dispuesto a apegarse al mandato constitucional contemplado en el artículo 272 de nuestra carta magna, que en forma expresa establece que las FFAA de Honduras «se instituyen para defender la integridad territorial y la soberanía de la República, mantener la paz, el imperio de la Constitución, los principios del libre sufragio y la alternancia en el ejercicio de la Presidencia de la República». 

Gral. Roosevelt Hernández: en el mandato constitucional no hay ninguna duda, las FFAA tienen como deber fundamental mantener el imperio de la Constitución, que de acuerdo a la doctrina del Derecho Constitucional, «imperio es la potestad de imperar, mandar y ordenar». La Constitución crea las FFAA y les ordena defender el imperio de la ley, que en su máxima expresión y contenido está en nuestra Constitución, vigente desde el 11 de enero de 1982. La obediencia que todos los sectores del país debemos a la Constitución no está supeditada a ningún funcionario. El mandato constitucional está muy definido: las FFAA son creadas o instituidas para defender la integridad territorial y la soberanía de la República, mantener la paz, y el imperio de la Constitución. 

La Constitución prioriza las primeras tres obligaciones de las FFAA: defender la integridad territorial, la soberanía de la República y mantener el imperio de la Constitución. Este es un aspecto fundamental en el que los altos oficiales de las FFAA no deben tener ninguna duda. Un caso muy similar, que es válido citar como ejemplo aconteció hace dos años en EEUU, cuando el entonces presidente Donald Trump pidió al Ejército que saliera a las calles a defender los resultados electorales que reclamaba a su favor, argumento usado por Trump para incitar a sus seguidores del Partido Republicano a que se tomaran las instalaciones del Capitolio, que en la tradición política estadounidense, es «la casa del pueblo».

La respuesta del Gral. Mark Milley, jefe del Estado Mayor Conjunto de las FFAA de EEUU, fue categórica al negarse a la petición de Trump. El Gral. Milley dijo con absoluta claridad que los militares de EEUU solo obedecían al imperio de la Constitución, no a un rey ni a un tirano. Mostrando el texto constitucional de EEUU, el Gral. Milley le respondió públicamente a Trump que los militares solo juran ante la Constitución, no a un rey ni a un tirano. La declaración del Gral. Mark Milley ha quedado impresa en la historia mundial, porque nunca antes un presidente había exigido a los militares que lo respaldaran para reclamar un triunfo electoral, que de acuerdo a las autoridades estadounidenses le favoreció al actual presidente Joe Biden.

El ejemplo de los militares de EEUU causó impacto a nivel mundial, porque frente a un político arrogante que creyó que podía pasar por encima de la ley, recibió una soberbia lección de los militares que lo pararon en seco, recordándole que las FFAA de EEUU no están para obedecer ciegamente a un funcionario dispuesto a violar la Constitución. Este es el mejor espejo en el que deben verse los altos oficiales de las FFAA, que en sus declaraciones no demuestran firmeza en el respeto y obediencia que deben tener a la Constitución.

No debe haber ninguna duda en las FFAA si llegaran a estar en la situación de que un Presidente de la Republica les ordene realizar una acción que atente contra el imperio de la Constitución. El Gral. Mark Milley, jefe del Estado Mayor Conjunto de las FFAA de EEUU le enrostró a Donald Trump el texto constitucional en la mano, recordándole que los militares juran ante la Constitución, no a un rey ni a un tirano. Cuando la Constitución de la República manda a las FFAA a defender el imperio de la Constitución, es la defensa de la nación hondureña que la formamos todos los ciudadanos que hemos nacido en Honduras.

La obediencia que deben los militares a la Constitución no debe ser mal interpretada, porque hasta ahora en Honduras solo en 2009 hubo el único caso cuando el entonces Presidente Manuel Zelaya pedía el respaldo de las FFAA a la «cuarta urna», igual que lo hizo Donald Trump hace dos años en EEUU, cuando pretendía que los militares lo acompañaran en su despropósito de tomarse el Capitolio para imponerse por la fuerza en un segundo período presidencial. Los militares estadounidenses hicieron lo que debían hacer: actuaron apegados a la Constitución.

Así son las cosas y así se las hemos contado hoy viernes 5 de enero de 2024.