Las esperanzas de encontrar el cuerpo del pequeño Elvis Bautista, arrastrado por las aguas de una quebrada en San Pedro Sula el pasado 14 de septiembre, se desvanecen tras más de una semana de intensas labores de búsqueda. El Cuerpo de Bomberos, junto a buzos de la Fuerza Naval, ha empleado recursos como caninos, inspecciones a pie, retroexcavadoras, dragados, remoción de escombros y agua a presión en socavados, sin resultados.
Este miércoles se realizará el último operativo de buceo en la zona del barrio Cabañitas para descartar la presencia del cuerpo del menor. De no hallarse, las autoridades dependerán de reportes ciudadanos para nuevas pistas.
La tragedia, ocurrida durante las celebraciones del 204 aniversario de la Independencia, se suma al dolor de la familia, que enfrenta la incertidumbre del paradero de Elvis mientras lidia con un conflicto interno: el padrastro del menor está bajo custodia policial por presunto abuso sexual contra una de las hermanas de Elvis.
La madre y los hermanos del pequeño esperan un cierre para darle cristiana sepultura, en un contexto de alertas climáticas por lluvias que han causado tres muertes y miles de afectados en Honduras, según Copeco, complicando aún más las operaciones de búsqueda y rescate en el país.