A 17 días de las elecciones generales del 30 de noviembre, el escrutinio especial en el Centro Logístico Electoral (CLE) del Consejo Nacional Electoral (CNE), ubicado en el INFOP de Tegucigalpa, aún no ha iniciado, provocando creciente preocupación por el estancamiento del proceso.
Miembros de las Juntas Receptoras de Votos permanecen en las instalaciones, pero representantes de los partidos Libre y Liberal son señalados por impedir el conteo, pese a su importancia legal para resolver inconsistencias en las actas.
Acusaciones cruzadas persisten: liberales culpan a nacionalistas, mientras el Partido Nacional apunta a militantes de Libre. La situación se agrava con denuncias de violencia, agresiones mutuas entre partidarios y renuencia de fuerzas de seguridad a intervenir, vinculada a recientes destituciones policiales ordenadas por la presidenta Xiomara Castro.