La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) advirtió este martes sobre el alarmante deterioro del espacio cívico en Honduras, según la octava entrega de su serie Estado de país. El informe documenta un entorno hostil para el ejercicio de derechos fundamentales, marcado por ataques desde instituciones estatales contra organizaciones de sociedad civil, periodistas, defensores de derechos humanos, iglesias, sector privado y cuerpo diplomático. Entre 2001 y 2025, se reportan 103 muertes violentas de periodistas y trabajadores de medios, con un 58% de impunidad. Además, en 2024, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) registró 284 ataques que afectaron a 319 víctimas, mientras que el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) documentó 133 quejas de periodistas entre 2016 y 2024, y C-Libre reportó que el 43% de las alertas de violaciones a derechos se dirigieron a medios y periodistas.
El informe destaca que Honduras mantiene un espacio cívico «reprimido» según el Monitor CIVICUS, con una puntuación de 40 en el índice Chapultepec 2024, reflejando restricciones a la libertad de expresión. Freedom House clasifica al país como «parcialmente libre», y Reporteros sin Fronteras alerta sobre un deterioro sostenido de la libertad de prensa. En 2025, el Observatorio de la Democracia de la Red por la Defensa de la Democracia (RDD) documentó 1,230 ataques en redes sociales desde cuentas de funcionarios públicos. ASJ también expresó preocupación por el estado de excepción, que suspende derechos fundamentales y otorga facultades extraordinarias a la Policía, considerándolo una posible herramienta de intimidación política. La organización exige al gobierno cesar los ataques, suspender el estado de excepción, fortalecer el Mecanismo Nacional de Protección y llama a la sociedad civil, la comunidad internacional y el pueblo hondureño a defender el Estado de derecho y la participación ciudadana responsable.