
La Presidencia de Turquía confirmó que este miércoles se celebrará en Estambul una tercera ronda de negociaciones de paz entre Ucrania y Rusia, en el palacio otomano de Çiragan, presionada por el ultimátum del presidente estadounidense Donald Trump, quien el 14 de julio amenazó a Moscú con aranceles del 100% si no se alcanza un acuerdo en 42 días.
Aunque las expectativas son bajas, con el Kremlin descartando “avances milagrosos” según el portavoz Dmitri Peskov, ambas delegaciones, lideradas por Rustem Umérov por Ucrania y Vladímir Medinski por Rusia, buscarán avanzar en temas como el intercambio de prisioneros y cadáveres, logrados en rondas previas. Ucrania insiste en un alto al fuego de 30 días y la liberación de cautivos, mientras Rusia exige neutralidad y la aceptación de la ocupación.
La reunión, la tercera desde mayo, se da en un contexto de tensión, con Kiev abogando por una cumbre entre Volodímir Zelenski y Vladímir Putin, rechazada por Moscú. Peskov destacó la complejidad de la agenda, que incluye memorandos de paz con puntos opuestos, y evitó comprometerse con plazos para una paz definitiva.
Mientras, la prensa rusa ve las negociaciones como una “emboscada” para Trump, quien apoya nuevos envíos de armas a Ucrania. El canciller alemán Friedrich Merz confirmó el respaldo de EE.UU. para enviar sistemas Patriot a Kiev, evidenciando el delicado equilibrio diplomático en torno al conflicto.