Este es un mensaje para los dos partidos históricos hondureños: Liberal y Nacional. Con el derecho que me asiste como hondureño, tanto en mi condición de elector, y como parte del régimen de opinión pública, quiero recordarle a los actores políticos de ambos partidos históricos, que el resultado obtenido en las urnas es suficientemente elocuente: el gran pueblo hondureño que es la inmensa mayoría, votó para desalojar del poder al PLR, distribuyendo su poder electoral entre los dos partidos, sin otorgarle una mayoría abrumadora a ninguno. Los electores decidieron repartir el poder en las urnas, de manera que los políticos deben acatar ese mandato del pueblo. Los hondureños queremos un gobierno de concertación nacional, no queremos que ninguno de los dos partidos históricos cometa el pecado de la glotonería, quedándose con todo el tesoro nacional para disfrute de un solo sector.
Si llegara a ganar el Partido Nacional, sus lideres deben recordar que doce años en el manejo de la cosa pública los desgasto y no por cometer pecadillos, pero, si llegara a ganar el Partido Liberal, sus dirigentes deben estar conscientes que no por estar 20 años en la llanura tendrían el derecho a hacer un gobierno solo para su partido. El voto repartido del gran pueblo hondureño, ejercido de manera masiva, primordialmente fue para salvar la democracia y permitir que los hondureños vivamos en un sistema de convivencia armónica, con tranquilidad social, que permita que nuestro país crezca con una economía saludable. Haber cortado las pretensiones del PLR de entregarnos a un régimen mafioso como es el «chavismo» sostenido por el tenebroso cartel narcotraficante de «Los Soles» de Venezuela, fue obra del gran pueblo hondureño que se volcó en forma masiva a las urnas. Deben entender los lideres politicos que el 30 de noviembre, más que un candidato, ganamos los electores y Honduras.
En este sentido, la sociedad hondureña no permitirá que, ni nacionalistas ni liberales, se crean los dueños del país y el presupuesto nacional. Los electores votamos para que los dos partidos históricos formen un gobierno de concertación nacional, que no significa un gobierno de repartición de puestos públicos. No queremos escuchar hablar de un gobierno «de integración» porque no es igual a un gobierno de concertación. El concepto de «gobierno de integración» forma parte de los acuerdos manidos de las horrorosas reparticiones de cargos del pasado. Un gobierno de concertación nacional está contemplado en los esquemas de desarrollo humano para la transformación. Hay muchos ensayos exitosos de gobiernos de concertación nacional, siendo los más exitosos los que han puesto en práctica los países europeos.
En este sentido, para formar un gobierno de concertación nacional en Honduras, se debe tomar en cuenta la proporción electoral de cada partido histórico: Nacional y Liberal. Conforme la proporción electoral obtenida, así deberá formarse el gobierno. Si uno de los partidos obtiene el 41 por ciento de los votos, mientras el otro logra el 39 por ciento, el gobierno deberá concertarse en la misma proporción, teniendo al presidente electo como el gran timonel del gobierno. Si el partido que obtenga la simple mayoria pretendiera erigirse como dueño y señor de la administración, los electores y demas sectores de la sociedad estaremos atentos para recordarle que el gran esfuerzo electoral del 30 de noviembre no fue para que un partido politico se adueñe del tesoro nacional.
El pasado 30 de noviembre hubo un gran parteaguas en Honduras, los electores hondureños, aunque no somos actores directos en la administración pública, demostramos que con el poder de nuestro voto podemos arrastrar y sacar del poder a los politicos abusivos, que todos estos años han demostrado ser buenos para saquear el país, pero no para trabajar y sacar adelante a Honduras. Honduras fue destrozada en los doce años de gobiernos nacionalistas, mientras que los cuatro años de gobierno del PLR equivalen a 16 años de latrocinio, corrupción y alianza con el narcotráfico internacional. Los hondureños no podemos permitir que los politicos sigan destruyendo el país. El PLR se valió de los gobiernos desastrosos anteriores para llegar al poder y refundir a nuestro querido país.
Por este motivo, apelamos a los líderes que serán los nuevos conductores del Estado hondureño; les exigimos que sean consecuentes con el esfuerzo que hicimos los electores el 30 de noviembre, cuando acudimos masivamente a las urnas a expulsar del poder a un partido abusivo, violador de la Constitución y demas leyes, pero no para entregarle el país a otro partido, para que siga cometiendo las mismas o peores barbaridades. Los electores hondureños exigimos un gobierno de concertación nacional, formado conforme la proporcionalidad electoral de cada partido, exigiendo que cada partido lleve a los cargos públicos a profesionales competentes y honestos, que si los tenemos en Honduras. Solo con un gobierno de concertación nacional, formado por hondureños decentes y capaces, es que Honduras lograra alcanzar el desarrollo humano, que es el escenario donde se construirá el bienestar de los hondureños.
Así son las cosas y así se las hemos contado hoy miércoles 10 de diciembre de 2025.