
No estamos hablando de desfigurar el calendario, porque no nos referimos al quinto mes del año. Hablamos del «Mayo» Zambada, posiblemente el capo mafioso del narcotráfico de Sinaloa más buscado por las autoridades de EEUU, junto a la otra triste celebridad del mismo cártel, el «Chapo» Guzmán. El «Mayo» Zambada escogió el mes agosto para declararse culpable de narcotráfico, y con ello, buscar expiar su culpa por el daño causado a la humanidad por el intenso comercio de las drogas más consumidas por los narcodependientes de muchos países.
No ha trascendido la cantidad de información que el «Mayo» Zambada proporcionó a la DEA y al Departamento de Justicia de EEUU, pero los medios especializados han publicado en varios reportajes que entre el «Chapo» Guzmán, sus hijos, los llamados «Chapitos» y el «Mayo» Zambada le dieron a EEUU toda la información que involucra a los principales abastecedores de la droga, en su mayor parte de Venezuela y Colombia, Centroamérica y una parte secundaria de Europa y Asia. Pero, fue el «Mayo» Zambada, el principal aportante de información que vincula al «Cartel de los Soles», formado por generales venezolanos que al terminar su carrera aceptaron un proyecto de Hugo Chávez que surgió luego de un intercambio que tuviera hace unos 35 años el líder del chavismo con el capo colombiano Pablo Escobar. Hace 10 años, el diario ABC de Madrid destaco que Pablo Escobar, quien declaró que con su capital podía pagar la deuda externa de su país, le habría aconsejado a Chávez que formara su propia organización para exportar droga para tener suficiente dinero para financiar su proyecto político sin sacrificar los ingresos por el petróleo.
El «Cartel de los Soles» tuvo su origen en este consejo de Pablo Escobar, y Hugo Chávez, ni corto ni perezoso lo puso en práctica. Hoy, el «Cartel de los Soles» es una realidad como el mismo astro del universo, el Sol. Gustavo Petro de Colombia lo niega, pero el pasado guerrillero de Petro lo delata. Petro es un mentiroso empedernido, parte de su campaña fue financiada por el narcotráfico, algo que quedó demostrado cuando un hijo suyo implicado en operaciones de drogas, dejó al descubierto que esos dineros fueron a dar a la campaña de Gustavo Petro.
Las revelaciones del «Mayo» Zambada le han servido a la DEA y al Departamento de Justicia de EEUU para poder sacar de la cripta de la secretividad, los nombres de los proveedores y colaboradores para hacer posible la entrega de los cargamentos de cocaína y marihuana, procesadas en Venezuela y Colombia, con destino a EEUU. En la Florida, el exembajador Charles Ford, que representó a EEUU en Honduras hasta principios de 2009, era hasta hace pocos años un factor importante para su país por haber recopilado en forma minuciosa el comportamiento del gobierno hondureño que presidió hasta ese año el entonces presidente Manuel Zelaya Rosales. Charles Ford elaboró un expediente de Mel Zelaya a partir de 2006, mismo que fue engordado por sus colegas que le sucedieron al momento de cesar en sus funciones. Ford envió un reporte especial sobre el avión que le fue enviado desde México al entonces presidente Zelaya al principio de su gobierno en 2006. El caso es que, en ese año, el «Mayo» Zambada y el «Chapo» Guzmán estaban en la plenitud de su carrera narcotraficante y su preocupación era tener aliados en C.A. que les colaboraran en el paso de los cargamentos de droga desde Venezuela y Colombia, para surtir el mercado consumidor en EEUU.
He allí la trascendencia de la declaración de culpabilidad del «Mayo» Zambada, porque la información desembuchada por el capo mexicano sirvió para que el Departamento de Justicia de EEUU confirmara el papel de proveedor de drogas de los generales venezolanos que conforman el «Cartel de los Soles», que no es un invento como sostiene Gustavo Petro, sino una organización con personas de carne y hueso, con la respectiva indumentaria militar dedicados al narcotráfico en gran escala.
El «Mayo» Zambada se declaró culpable a mediados de agosto, no sin antes haberle entregado al gobierno de EEUU toda la información que incrimina al «Cartel de los Soles», con la que busca minimizar el impacto de su condena, aunque la fiscal de EEUU busca refundirlo de por vida en una prisión de máxima seguridad. Fue en ese momento, cuando EEUU comenzó su tenaz persecución contra Nicolás Maduro, Diosdado Cabello y Padrino López. El «Cartel de los Soles» no es un invento, es una organización real como otras de su género narcotraficante.
El asunto es que EEUU ahora no solo busca capturar a los tres líderes del tenebroso cartel venezolano, sino también a sus socios-colaboradores ubicados en la zona intermedia entre Venezuela y EEUU, que geográficamente delata a Honduras, Guatemala y México. He allí el quid del asunto: el por qué EEUU no puede dejar a medias el operativo militar montado desde finales de esta semana con un asedio salvaje que implica destructores, portaviones, centenares de aviones, submarinos nucleares y miles de infantes de marina. La estrategia conlleva no solo capturar o dar muerte a Maduro y su alto mando, es destruir todo el «Cartel de los Soles». Pero comienza por quitar del escenario a Nicolás Maduro en primer lugar. Así de simple es la estrategia.
Así son las cosas y así se las hemos contado hoy martes 26 de agosto de 2025.