LAS URNAS CONTRA LA CALLE

El Consejo Nacional de Elecciones procedió al mediodía de este jueves 29 de mayo a convocar a Elecciones Generales en forma oficial, por lo cual los hondureños debemos prepararnos para acudir de nuevo a las urnas, esta vez a elegir un nuevo Presidente de la República, diputados al Congreso Nacional y alcaldes de todos los municipios de nuestro país. De esta manera, en teoría, como lo venimos expresando, nuestro país consolida su democracia, aunque sabemos que no disfrutamos de una democracia saludable sino el estado más pervertido de lo que quisiéramos fuera una verdadera democracia.

Pero, en la moderación que se nos impone para no ser propagadores de un pesimismo que puede terminar por arrollarnos, al extremo de llevarnos al abstencionismo que es la peor expresión de los ciudadanos, tenemos que decir con franqueza que nos alegró sobremanera escuchar a la valiente Presidente del CNE junto al resto del pleno del organismo, hacer el llamado a los partidos y a los ciudadanos para acudir a las urnas el próximo 30 de noviembre, cuando los hondureños debemos levantar el edificio de alternativa al actual gobierno populista del PLR.

Los populistas del PLR no pudieron escribir paginas favorables para Honduras en estos tres años y medio de su gobierno, su estilo político es el de llevarnos por el camino de la perversión democrática, plagada del ruido mediático en las redes sociales y espacios tradicionales que nos han costado a los contribuyentes miles de millones de lempiras, dinero que se evaporó en la nada y que bien hubiera servido para comprar medicinas y mejorar el estado deprimente en que se encuentran los hospitales públicos que atraviesan el peor estado de desatención en que nunca habían estado antes.

Reconforta saber que, al menos, el 30 de noviembre los hondureños tendremos la oportunidad de voltear esta página horrible de la historia que estamos viviendo, y que será en las urnas en que los hondureños podremos expresar con claridad y contundencia que queremos seguir viviendo en democracia y libertad. Pero más allá de esa oportunidad que no debemos desperdiciar, debemos tener presente que como hondureños bien nacidos tenemos la obligación de apoyar al CNE, especialmente a las dos concejales representantes de los partidos democráticos que demostraron el pasado 9 de marzo que son capaces de entregarse en cuerpo, alma, vida y corazón a defender la causa de la democracia.

Los dos partidos democráticos, Partido Liberal y Partido Nacional, están obligados a reflexionar sobre el peligro que acecha a Honduras por parte del proyecto político del populismo internacional que patrocina al PLR; si bien es cierto que una coalición entre ambos partidos es casi imposible por la sinrazón que ciega a los líderes que solo saben apuntar hacia donde los guían las ambiciones desmedidas, esta vez será la sociedad hondureña la que en su momento formule el llamado a los ciudadanos en general, para que dirijan su voto hacia el candidato que, reciba el respaldo mayoritario de los ciudadanos. 

Algunos dirigentes y líderes de ambos partidos tradicionales se soliviantan mucho cuando se les habla de que, es necesario formar una coalición y no una alianza, porque esta última es sinónimo de repartición de cargos, privilegios y beneficios, algo que aborrece el pueblo hondureño, mientras que, una coalición se establece en base al noble propósito nacional que es preservar la democracia. Los políticos tradicionales viven solo para buscar el poder, pero en las circunstancias que vivimos cuando se les reprocha la tibieza con la que se comportan y actúan sobre la sarta de abusos del partido gobernante, lo que es una forma de aupar el desorden imperante, se hacen los desentendidos y le pasan la pelota al pueblo diciendo que es el culpable por haber votado por el PLR.

Entonces, es en este momento de la historia cuando nos toca dar lo mejor de todos los hondureños para salvar a nuestro querido país de las garras del bestial populismo, que es el orden que pone por delante el desastre de Cuba como el modelo que quieren imponernos a los hondureños, o la tragedia que viven los venezolanos, impuesta por la fuerza de un ejército convertido en un cartel del narcotráfico con un sátrapa a la cabeza.

El PLR nació como un partido que busca imponerse por medio de la violencia a través del desorden callejero, frente a ese modelo está el que preferimos la gran mayoría de los hondureños, que es el gobierno electo en las urnas en forma democrática. La convocatoria hecha hoy por el CNE es la afirmación del ejercicio de fe democrática, en defensa del derecho de los ciudadanos que, al acudir a las urnas, muestran su repulsa ante cualquier organización o partido que pretenda apoderarse por la fuerza y las triquiñuelas de la dirección de los destinos de Honduras. Porque es en las urnas donde se puede contrarrestar la irrupción de la fuerza bruta, y si no acudimos masivamente a votar el 30 de noviembre, ¡después será demasiado tarde!

Así son las cosas y así se las hemos contado hoy jueves 29 de mayo de 2025.