
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, firmó un préstamo de 50 millones de dólares con el Fondo OPEP para el Desarrollo Internacional (OFID), tras una reunión con su presidente, Abdulhamid Alkhalifa. Este financiamiento, parte de un paquete total de 130 millones que incluye 80 millones de la Corporación Andina de Fomento (CAF), busca fortalecer programas sociales enfocados en mujeres, personas con discapacidad, pueblos indígenas y comunidades afrodescendientes, según explicó el secretario de Finanzas, Christian Duarte. El acuerdo refleja las prioridades de la primera mujer presidenta de Honduras, quien ha centrado su agenda en apoyar a poblaciones vulnerables.
El préstamo del Fondo OPEP ofrece condiciones favorables, con 5 años de gracia, 15 años para amortizar y una tasa de interés del 6 %, más baja que el 9-10 % del mercado internacional, lo que Duarte calificó como una alternativa responsable para financiar proyectos sociales ante la limitada recaudación tributaria. Sin embargo, el nuevo endeudamiento genera críticas en un año electoral, con temores de que los fondos puedan desviarse a campañas políticas, como ocurrió recientemente con el caso de SEDESOL, a pesar de que el gobierno destaca el respaldo internacional a sus reformas.