
En una noche épica en Údine, el PSG de Luis Enrique se alzó con la Supercopa de Europa al vencer al Tottenham (2-2, 4-3 en penales), logrando su segundo título continental consecutivo tras la Liga de Campeones ganada en Múnich.
El equipo parisino, que parecía sentenciado con un 0-2 en contra hasta el minuto 84, protagonizó una remontada histórica gracias a los goles de Kang-In Lee y Gonzalo Ramos, quienes desde el banquillo reavivaron las esperanzas y llevaron el partido a una tanda de penales donde los franceses se impusieron, consolidando un año histórico con la etiqueta de ‘Supercampeón’.
El PSG, lejos de su versión arrolladora de Múnich, sufrió ante un Tottenham tácticamente sólido, que capitalizó el balón aéreo con goles de Van de Ven (minuto 39) y ‘Cuti’ Romero (minuto 48), este último tras un error del portero Chevalier.
Sin pretemporada y afectado por la derrota en el Mundial de Clubes y la polémica con Donnarumma, el equipo parisino careció de ritmo, pero su resiliencia y calidad emergieron en los minutos finales. Un zurdazo de Kang-In Lee en el 84 y un cabezazo de Ramos en el 94 forzaron los penales, donde, a pesar de un fallo inicial de Vitinha, el PSG prevaleció. Luis Enrique, con esta remontada, mantiene vivo el sueño del ‘sextete’ para un club que sigue haciendo historia.