Cuando los ingleses estaban regidos por la mano férrea de la primer ministra Margaret Thatcher, hubo voces de protesta que se alzaron contra la mujer que dirigía los destinos de una Inglaterra que, después del liderazgo sobresaliente de Winston Churchill, atravesó períodos de decadencia que pusieron a ese gran país al borde de la quiebra política, frente a la pronta recuperación alemana y el celo de Francia que nunca ha llevado la fiesta en paz con los ingleses. Cuando los argentinos se rebelaron a aceptar que las Malvinas debían continuar como territorio colonizado por Inglaterra, la primer ministra Margaret Thatcher, sin consultar al parlamento, decidió que debía sofocar la rebelión argentina, e hizo que la Armada y la Real Fuerza Aérea se encargaran de mantener la hegemonía inglesa en las Malvinas. La anécdota más curiosa en este capítulo es que Margaret Thatcher, después de tomar tan extraordinarias decisiones, como la de declarar la guerra a Argentina, regresaba a su casa a preparar la cena para ella y su esposo, como cualquier mujer de hogar.
Un comparativo, dimensionalmente distinto, acontece con Cossette López y Ana Paola Hall, ambas madres de familia, con obligaciones en su hogar, que han debido soportar jornadas impregnadas de alta tensión en el Consejo Nacional de Elecciones, para sacar adelante los procesos electorales de los que depende mantener la democracia en Honduras, a costa de poner en peligro su estabilidad y su humanidad. Ambas profesionales hondureñas, han demostrado su entereza ciudadana y patriótico, armándose de valor y de coraje para enfrentar el acoso de su colega concejal Marlon Ochoa, del PLR, que desde un principio ha actuado como un lobo feroz, sometiendo a ambas compatriotas a un acoso permanente, manteniendo elementos militares dotados con perros feroces, a manera de gendarmes con mala cara, con espíritu intimidatorio, sobre las oficinas de las concejales Cossette López y Ana Paola Hall, con la deliberada intención de crear un clima de intimidación a lo interno del CNE, lo que es igual a amenazar con una pistola a la persona a la que se busca someter.
Muchas veces con el disfraz democrático, se puede observar este ambiente en situaciones como las que denuncio hace un par de días la concejal Cossette López, en un ámbito como el del CNE, donde el partido gobernante tiene la clave para imponerse y lograr su objetivo de mantenerse en el poder. En este organismo, la democracia hondureña depende de la capacidad de resistencia moral y física de las concejales Cossette López y Ana Paola Hall. No solo frente a su colega Marlon Ochoa, que en sus apariciones públicas pretende engañar actuando como una mansa palomita de castilla, siendo todo un moderno Nerón, como se exhibió en un acto frente al edificio de la Embajada Americana, enfrentando también el acoso inadmisible del jefe del EMC de las FFAA, Roosevelt Hernández, que al frente de una soldadesca tuvo el descaro de atropellar a la comisionada presidente del CNE, Cossette López. Agregando a todo esto la andanada de ultrajes que les dispara a ambas concejales la batería guerrillera del PLR, que viven para atacarlas en las redes sociales, buscando a toda costa desmoralizarlas, en una guerra sucia sin precedentes.
La intimidación de acuerdo a la doctrina del Derecho, es uno de los vicios del consentimiento, es decir, solo es intimidado quien consiente que se le intimide, pero en el caso de Cossette López y Ana Paola Hall, ambas han demostrado una enorme capacidad de resistencia para no dejarse intimidar, haciendo de tripas corazón, para poner en cintura a Marlon Ochoa en primer lugar, haciendo caso omiso de sus bravuconadas y haciendo a un lado los nutridos ataques con diatribas y difamaciones que les lanza el corpulento ejército de guerrilleros por internet que mantiene el PLR, con el fin de ablandar a las concejales para que abandonen sus responsabilidades y sus cargos. Pero ninguno de estos objetivos ha conseguido, porque la concejal Cossette López sacó adelante las Elecciones Primarias, mientras que la concejal Ana Paola Hall ha hecho promesa firme de que los hondureños tendremos elecciones en noviembre.
Ambas concejales demuestran estar comprometidas con la democracia por lo que se han ganado la admiración y el respeto de los hondureños que amamos la democracia, igual que el respaldo de la comunidad internacional que es algo valioso, porque los representantes de organismos como la Unión Europea y de la potencia democrática mundial que es EEUU, han advertido el clima de chantaje y amenazas que ha buscado crear el sector oficial en el CNE, con actos que degeneran la democracia, como el hecho de que una comisión espuria del Congreso Nacional, nombrada por el usurpador presidente del Congreso, Luis Redondo, les exija a las concejales rendirles cuenta, algo inverosímil que constituye el hecho de que dos concejales electas legalmente con todos los rigores de la ley, deban rendir informe a una comisión espuria que no fue electa por el pleno de la Cámara Legislativa sino por una sola persona que sigue acobijado por los chiringos ilegales de un diputado que usurpa la Presidencia del Congreso Nacional, fuera de todo el marco legal.
Mayor demostración de valentía, honorabilidad y compromiso con Honduras no podíamos encontrar en otras personas, en cambio dos profesionales, dos hondureñas a carta cabal, bien nacidas, están decididas a enfrentar a los modernos nerones para sacar adelante las Elecciones Generales, aun a costa de los acosos del colega infiel con el organismo electoral, encarar a la maquinaria acosadora del PLR teniendo al MP como perro de garra y hasta la inadmisible intervención de un alto mando militar que ha enlodado el poco prestigio de las FFAA al convertirse en lacayos de un gobierno y de un partido. Enfrentar esta ristra de adversidades solo es posible en personas que tienen carácter y temple de acero. Y estos son los atributos que poseen Cossette López y Ana Paola Hall. A ellas, nuestra profunda admiración y gratitud ciudadana.
Así son las cosas y así se las hemos contado hoy viernes 25 de abril de 2025.