
Tegucigalpa, Honduras.
Municiones, armas de grueso calibre, cargadores, chimbas, teléfonos celulares y satelitales, más explosivos de fabricación caseras, radios, routers, sierras eléctricas, forman parte del decomiso que realizaron este día agentes de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) en conjunto con la Policía Nacional de Honduras dentro de un solo módulo de la penitenciaría La Tolva.
Según afirmó el Secretario de Estado en el Despacho de Defensa Nacional, José Manuel Zelaya Rosales, muchos de los reos han llegado a usar métodos macabros para ingresar cualquier tipo de armas a los centros penitenciarios, al grado de esconder granadas explosivas dentro de sus propios cuerpos.
Dicho operativo y control ejecutado por oficiales y soldados pretende que las cárceles dejen de ser escuelas del crimen organizado.
Y es que Honduras sufre una ola de violencia que se cobra víctimas todos los días. Además de la presencia de las pandillas Mara Salvatrucha y Pandilla 18 que imponen el terror en las ciudades y mantienen el control de amplios territorios, el país sufre la violencia del crimen organizado, principalmente el narcotráfico, cuyos grupos ven en la nación un importante centro de operaciones y tráfico.

En ese sentido, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, aseguró que mediante el plan de seguridad «Solución Contra el Crimen» y el «Estado de Excepción», parcial, en vigor desde diciembre de 2022, se dará un golpe duro a las estructuras criminales que siembran temor y criminalidad en Honduras.
«Se inician múltiples operativos, allanamientos, capturas y retenes durante las 24 horas, aplicando a partir de este día un toque de queda especial para Choloma», desde las 9:00 p.m. hasta las 4:00 a.m. indicó la mandataria en un mensaje en la red social Twitter. En San Pedro Sula el «toque de queda será a partir del 4 de julio», durante «15 días prorrogables», según dijo Castro de Zelaya.

