Este lunes 15 de julio de 2024 se cumplen 900 días desde que la presidenta Xiomara Castro asumiera la presidencia de Honduras y prometiera como una de sus primeras acciones de gobierno la instalación de la Comisión Internacional Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (CICIH). Promesa que se desvanece entre innumerables excusas.
A mediados de junio, Honduras y la ONU firmaron la cuarta extensión del memorándum de entendimiento (MOU) para preparar el camino que permita instalar el cuerpo anticorrupción.
Autoridades de la ONU mantienen su postura, en que el eventual establecimiento de un mecanismo anticorrupción en Honduras requiere, primero incluir «por escrito, un mínimo de garantías legales para el establecimiento y operatividad» de esa entidad, mismas que aún no existen.
Por su lado, la administración gubernamental pretende pedir al organismo internacional, instalar la CICIH y luego realizar las reformas correspondientes. Como una forma de garantizar una excusa y argumentar que es la ONU la que obstaculiza el establecimiento de la cicih.