La operación antidrogas en la que se realizó la extensa erradicación de coca, se desarrolló en una región montañosa de la comunidad de Lorea o Río Oro, en el municipio de Iriona, Colón, ubicado en la zona atlántica de Honduras.
Según fuentes de la ATIC, el laboratorio clandestino de drogas fue identificado en un lugar apartado, donde los narcotraficantes operaban de manera clandestina.
Además de desmantelar la infraestructura del laboratorio, los agentes realizaron la recolección de muestras de precursores químicos, empleados por las organizaciones criminales para la fabricación de pasta de coca.
En el mismo lugar, fue encontrado un arma larga, tipo escopeta, que se cree pertenecía a los operadores del narcolaboratorio. Este hallazgo añade un nuevo elemento de preocupación a la ya alarmante situación de la producción de drogas en la región.
El desmantelamiento de este narcolaboratorio y la erradicación de los cultivos de coca fueron posibles gracias a la coordinación efectiva entre la ATIC, la Fiscalía Local de Trujillo, y el XV Batallón de Fuerzas Especiales con sede en Silín, Colón.