Un grupo de más de 200 agentes buscan a supuesto asesino de cinco hondureños en Texas

Washington

La Oficina Federal de Investigación (FBI), de Houston, Estados Unidos, a través de su cuenta en Twitter, ha informado que más de 200 agentes, se han unido a la búsqueda del supuesto responsable del asesinato de cinco personas de nacionalidad hondureña, entre las victimas un menor de 8 años, el hecho se registro el pasado viernes en Cleveland (Texas).

Se informo que los agentes se han desplazado al lugar, tocando puerta por puerta en busca de pistas que les permitan arrestar al sospechoso del crimen.

Por su parte el sheriff del condado de San Jacinto (Texas), Greg Capers, manifestó «Estamos yendo puerta por puerta con estos 200 agentes, llamando a las casas de los vecinos, haciendo preguntas y buscando pistas».

De igual manera se conoció que las autoridades están ofreciendo una recompensa de 80.000 dólares, para que puedan ofrecer información que conduzca al arresto del autor del tiroteo, identificado como Francisco Oropesa, de 38 años y de nacionalidad mexicana.

Relato de los hechos

El pasado viernes por la noche, Oropesa estaba disparando en el jardín de su casa con un fusil AR-15 cuando uno de sus vecinos se le acercó y le pidió que dejara de hacer ruido porque era muy tarde y la familia, incluidos unos niños, no podía conciliar el sueño.

Oropesa respondió irrumpiendo en la vivienda de sus vecinos para dispararles en el cuello y la cabeza, como si se tratara de una «ejecución», según ha descrito la oficina del sheriff.

Dentro de la vivienda había diez personas y cinco perdieron la vida. Los nombres de los fallecidos son Daniel Enrique Lazo, de 8 años; Sonia Argentina Guzmán, de 25 años; Diana Velásquez Alvarado, de 21 años; Obdulia Molina Rivera, de 31 años, y José Jonathan Cáceres, de 18 años.

Se informó que las autoridades pensaban que tenían al sospechoso acorralado en una zona boscosa cercana al lugar del tiroteo; pero, perdieron su rastro y, este domingo, tras ampliar al perímetro de búsqueda, reconocieron que no saben siquiera si el sospechoso se encuentra aún en la zona.

«No sabemos dónde está», dijo en la misma rueda de prensa el agente a cargo de la oficina del FBI en Houston, James Smith, quien admitió que ahora mismo las fuerzas de seguridad no tienen ninguna pista sobre el paradero del sospechoso.

Sin embargo, el FBI cree que Oropesa pudo haber contactado a sus amigos para pedirles ayuda para escapar y, ahora, los agentes están intentando identificar a esos amigos para interrogarles.

Las fuerzas de seguridad ya han interrogado a la esposa del acusado «dos o tres veces» y se mantienen en contacto con ella, detalló Capers.

El FBI y la oficina del sheriff han distribuido en redes sociales imágenes del sospechoso y, además, se han colgado en el vecindario letreros en español para pedir colaboración a la comunidad hispana del condado de San Jacinto, una zona rural de Texas con solo 27.000 habitantes.