Alix Didier Fils-Aimé asumió este lunes como primer ministro de Haití, tras la destitución de Garry Conille, y pidió unidad para enfrentar los problemas del país, especialmente la creciente amenaza de las bandas criminales. En su discurso, Fils-Aimé destacó la importancia de restablecer la seguridad, incluyendo la protección de la población, bienes e infraestructuras, y la libertad de circulación, como la tarea principal de su gobierno. En un contexto de creciente violencia, donde las pandillas lideradas por figuras como «Barbecue» han intensificado sus ataques, las actividades comerciales y educativas en Puerto Príncipe estuvieron paralizadas el lunes.
Fils-Aimé prometió trabajar por una recuperación económica, destacando que la seguridad es esencial para el desarrollo de sectores clave como la agricultura, comercio e infraestructura. También subrayó la necesidad de organizar elecciones legítimas y garantizar la paz en el país. Por su parte, el presidente del Consejo Presidencial de Transición, Leslie Voltaire, instó a actuar con rapidez para corregir las fallas en el gobierno y establecer las condiciones de seguridad necesarias para realizar un referéndum y elecciones antes de finales de 2025.