El clima social y político de un país es el estado de ánimo de la población respecto a la clase política gobernante, causado por las medidas que toma el gobierno, especialmente las que golpean las condiciones de vida de las personas; el clima entonces pasa a ser un humor social pesado, cuando las autoridades se empeñan en hacerle más difícil enfrentar la situación a los padres de familia y a los jóvenes en especial. Pero, el humor social se vuelve más espeso cuando los ciudadanos ven que los que ejercen el poder se reparten con la cuchara grande sin guardar ningún escrúpulo, como cuando el pueblo hondureño conoció el nepotismo gigantesco de las familias gobernantes que monopolizan los cargos más importantes del gobierno, sin duda la denuncia que mantiene enfurecidos a los hondureños, entre los que hay miles de personas que creyeron en las promesas de la Presidente Xiomara Castro.
El humor social pesado que se percibe en Honduras es el hallazgo más sobresaliente que muestra la encuesta de Paradigma en este mes de septiembre, donde los encuestados reflejan en sus respuestas el estado de rencor, resentimiento, odio y venganza en la esfera política gobernante, lo que agrava el deterioro en que ha caído la administración de la Presidente Xiomara Castro, que según la misma encuesta, va en picada con un 51 por ciento que califica la gestión de doña Xiomara de «mala a muy mala», una desaprobación que debe hacer reflexionar a todas las esferas gobernantes, porque no se trata solo de asuntos de popularidad sino de otras implicaciones que arrastran a todo el país.
Pero, lo toral de la encuesta es ver cómo un 12 por ciento de los encuestados ven el espíritu de rencor con que actúa el gobierno, mientras que un 13 por ciento de los entrevistados ven reflejado un resentimiento en las actuaciones de los funcionarios. Y más grave es que un 20 por ciento de los consultados ven una conducta de odio en el gobierno y más aun, un 26.3 por ciento considera que el espíritu del Gobierno de LIBRE es de odio. Si sumamos los cuatro componentes del humor social político auscultado por la encuesta Paradigma, tenemos que un 71 por ciento de los consultados no ocultaron sus temores por la conducta del Gobierno de LIBRE, por lo que dan una calificación temerosa pero esta ajustada a los resultados y actuaciones del gobierno.
Los hallazgos de la encuesta deberían hacer que el Gobierno de LIBRE ponga las barbas en remojo, porque todo el malestar reflejado en los encuestados es avasallador contra la Presidente, contra el coordinador del gobierno y contra el Partido LIBRE, que no podrá enfrentar el desacuerdo nacional que hay contra su forma de hacer gobierno, que cada vez pone a Honduras en una situación más crítica, como se observa en el escenario nacional, donde las medidas erráticas acentúan la crisis económica, especialmente por el creciente desempleo provocado por la predica anti empresarial que maneja el coordinador del gobierno y varios funcionarios que se aferran a respaldar medidas que hunden al país.
Cada vez son más las empresas extranjeras que anuncian su retiro de Honduras, sin que esto pareciera preocuparle al Gobierno de Xiomara Castro, que continua con un discurso ideológico altisonante, alejado de la realidad hondureña, que es de una pobreza galopante pero que para la Presidente Castro pareciera no ser significativa, porque por encima de todo para el Gobierno de LIBRE esta elegir a un fiscal general que cumpla sus caprichos. Mientras la comunidad internacional observa con preocupación que el mayor interés del gobierno es copar todos los poderes posibles, mediante una extraña conducta «democrática inconstitucional» que atenta contra el régimen de libertades y que no ignoran los representantes de los países extranjeros y organismos internacionales.
Por donde se mire, el Gobierno de LIBRE que preside doña Xiomara Castro, está dedicado a practicar el fascismo, acusando a los adversarios de los mismos males y vicios que padece LIBRE y de los cuales ya se empiezan a escuchar menciones en las cortes de Nueva York. El panorama hondureño es triste y lamentable, porque la Presidente pareciera que desde un inicio renuncio a manejar el timonel de la gran nave hondureña, dejándola en manos de su asesor presidencial que tiene a su lado a un grupo de expertos internacionales de varias nacionalidades, que saben cómo manejar el fraude electoral.
Esto es grave para Honduras, porque el Gobierno de doña Xiomara no trabaja por mejorar el bienestar de los hondureños, su gran obsesión es perpetuarse en el poder por la ruta del fraude electoral, que desde ahora se está trabajando con la asesoría de reconocidos prófugos internacionales.
Así son las cosas y así se las hemos contado hoy viernes 8 de septiembre de 2023.