
En un país de tozudos donde la altanería y la terquedad son la característica casi generalizada, ver un acto de rectificación en un funcionario público es algo muy raro, porque, por lo general la persona que es terca está llena de arrogancia. Es el prototipo del que todo lo sabe y aunque ignore muchas cosas, termina inventando lo que ni siquiera ha visto en su vida. En las esferas políticas abundan los tercos y los altaneros, algunos con un ego dimensional que les ajusta para tocar el cielo por creer que están a la altura de Dios.
No es común ver en Honduras un gesto de reconocimiento de un error o una falla en un funcionario público, sobre todo en un ambiente político autoritario como el que impera en todos los mandos del Gobierno de LIBRE, donde la mayoría de los funcionarios han entrado en una carrera loca de enriquecimiento por la vía salarial, aumentándose los sueldos de una manera desproporcional a la realidad económica del país. La mayoría de los funcionarios del gobierno de Xiomara Castro, más pareciera que vivieran en Jauja, el misterioso pueblo suramericano donde todos los habitantes se bañaban en oro.
El primero que invoco un aumentazo fue un tal Briceño, que se quejaba que su salario apenas era de más de cien mil lempiras, con un argumento bárbaro pleno de oportunismo, porque trabajando en una empresa a lo mejor nunca gano ni la cuarta parte de lo que recibe del gobierno. Y así por el estilo, funcionarios muy conocidos, medio conocidos y pocos conocidos, todos se han recetado con la cuchara grande, tremendos aumentos salariales que los debe tener locos de alegría, porque han logrado refundar sus bolsillos con sueldos que nunca se imaginaron tener en la vida.
En esa carrera de aumentos entro el director del IHSS, Dr. Gaspar Rodríguez, quien la semana anterior se había aumentado más de 64 mil lempiras de sueldo, lo que provocó una ola de reacciones en su contra, sobre todo por la crítica situación que atraviesa el Seguro Social, que brilla por la carencia de atenciones y medicamentos a los derechohabientes. Sin embargo, sin duda por las críticas, el Dr. Rodríguez desistió del aumento, quedándose con su nivel salarial vigente. Cualquiera que haya sido la razón que provocó la reacción del Dr. Rodríguez, para desistir hacerse el aumento, es motivo para aplaudir su rectificación, y no para pararnos en el peñón de Gibraltar y creer que ha sido una victoria de las presiones, sino para enaltecer el espíritu de rectificación que hizo aflorar en el Dr. Rodríguez la parte buena de sus sentimientos.
Einstein definió la locura como la necedad de insistir en hacer lo mismo una y otra vez, esperando resultados diferentes, lo cual retrata de alguna manera no la persistencia sino la tozudez, no la confianza en lo que se hace sino la incapacidad para rectificar. Y esto, como decía Einstein, es porque rectificar no siempre resulta fácil. Se requiere valor para rectificar, porque generalmente el que comete un error o una falla, se aferra al mismo, aunque le digan de todos lados y de mil maneras, que lo que ha hecho es un error.
El Dr. Rodríguez pudo haber resistido la andanada de críticas una semana, o dos semanas, y poner piel de lagarto y al cabo de un par de semanas todo habría pasado y él se hubiera quedado con el bolsillo más gordo. Pero le pudo más su estado de conciencia y ante las críticas decidió quedarse con el salario actual, rectificando y desistiendo del aumentazo. Por eso se merece un reconocimiento, porque no todas las personas tienen ánimo para rectificar, sobre todo tratándose de dinero.
El Dr. Rodríguez debe saber que son muchos los éxitos que nacen de una rectificación a tiempo. El Seguro Social se debate en una situación difícil y por ahora no se vislumbra una recuperación. Ni a corto ni a mediano ni mucho menos tan rápido como esperan los derechohabientes, Y los números del Seguro Social no hablan de crecimiento ni de confianza de los beneficiarios y aportantes, el Seguro Social es números rojos por donde se le mire y se le busque. Un aumento de salario en esa institución debe descartarse de plano.
La rectificación del Dr. Gaspar Rodríguez debe ser imitada por los directivos y demás funcionarios del Seguro Social y de otras instituciones del gobierno que se recetaron aumentos. La rectificación del Dr. Gaspar Rodríguez puede ser el inicio de la recuperación del Seguro Social. Así son las cosas y así se las hemos contado hoy viernes 13 de octubre de 2023.