
¿Dónde puede ocultar el diputado Luis Redondo tanta infamia, si es que tuviera capacidad para hacerlo, como para ir al recinto parlamentario de los rusos a mostrarse como presidente del parlamento hondureño, sabiendo que funge como el más ilegal de los usurpadores en ese importante cargo? Provoca ira ver al diputado Redondo llegar a la duma rusa, hablar en nombre de nuestro país, con lo cual termina de llenarnos de vergüenza a los hondureños que sabemos que es lo peor que nos pudo haber sucedido, ver a una persona que por obra de la audacia y la temeridad, asalto la presidencia del Congreso Nacional, apoyado por el Partido LIBRE que vio en Luis Redondo el personaje más oscuro con el que podía alcanzar los objetivos más abyectos, como el tristemente célebre «Decreto de Amnistía» o «Pacto de Impunidad».
El diccionario de la lengua española define el termino infamia como «descrédito, deshonra, maldad o vileza», en todo sentido. El ilegal presidente del Congreso Nacional, diputado Luis Redondo, encarna todas estas acepciones a la perfección. Su presencia ilegal al frente del parlamento hondureño es una gigantesca falsedad al haber aceptado asumir la presidencia del parlamento hondureño impuesto de una manera violenta y arbitraria. Sostenerse en ese poder del Estado por el respaldo de un sector del Partido LIBRE, no le garantiza que tiene una trayectoria perenne, porque en el momento que deje el cargo, que le llegara cuando menos lo espere, tendrá seguro un alojamiento carcelario por usurpar funciones de alto nivel en forma ilegal, tipificado en el Código Penal como un delito grave que está penalizado con muchos años de cárcel.
Llegar al parlamento ruso en condición usurpadora, para los dirigentes de la duma no amerito escudriñar la situación ilegal de Redondo porque los rusos no son un dechado democrático, dada que su constante es la antidemocracia, y su cohabitar es la dictadura extensiva, a la cual se han acostumbrado y con la que conviven de una manera anormal. Para los rusos aferrarse al poder es el quehacer político, por eso, reciben a Luis Redondo como uno de los suyos, y por eso le ofrecieron el podio principal, para que este bárbaro de la política hondureña luciera su regordeta personalidad, hablando a nombre de Honduras, un abuso imperdonable tratándose de un ilegal y usurpador a la vez.
En cambio, por esta irregular presencia de Redondo en la dirección del Congreso Nacional, es que el gobierno de Xiomara Castro no podrá percibir el apoyo económico de los fondo de la Cuenta del Milenio, como es imposible que la ONU preste su concurso para coadyuvar a la instalación de una comisión contra la corrupción y la impunidad, que de hacerlo sería un contrasentido del tamaño del Himalaya, siendo que, uno de los grandes objetivos de la ONU que consta en su carta constitutiva, es combatir la corrupción en el mundo. Y patrocinar la CICIH en la actual situación de Honduras, mientras no se subsane el desaguisado que es tener el Congreso Nacional con una directiva ilegal y usurpadora, para la ONU significaría descalabrarse como foro mundial contra la corrupción.
En otras palabras, al hablar a nombre de los hondureños en la duma rusa, el diputado Luis Redondo mintió como un bellaco, aprovechando que la mentira algunas veces no solo es impune en términos legales, sino que es enormemente rentable en aquellos escenarios donde los que aplauden son igual de mentirosos e ilegales. Una vez más el diputado Luis Redondo traiciono lo más sagrado que debe cuidar un personaje público que es su credibilidad, pretendiendo avalar con su mentira que hablaba en nombre de todos los hondureños. En tal situación de indecencia, Redondo no tiene ninguna calidad para representarnos a todos los hondureños, en primer lugar, porque la mayoría no votamos por el para diputado. Por su condición ilegal y usurpador, Luis Redondo es un escarnio escandaloso que nos llena de vergüenza.
Usurpar la representatividad del pueblo hondureño en el podio principal de la duma rusa, debería ser suficiente para apartar de la vida pública al diputado Luis Redondo, igual que hacían los antiguos romanos al declarar infames a quienes se habían degradado con sus actos y sus hechos, como lo hace el diputado Redondo, que cada día agiganta su condición de presidente ilegal del Congreso Nacional, por lo cual ha perdido el mejor crédito que un día tuvo como «el tocador del bombo de la Selección Nacional».
Así son las cosas y así se las hemos contado hoy jueves 5 de octubre de 2023.