La enfermería es una de las profesiones más valiosas y útiles para la ciudadanía, que nació con la aparición del hombre sobre la tierra, debido a la necesidad inminente de recibir los cuidados necesarios ante las adversidades de la salud. Lo que hasta hace poco era un oficio, debido al conocimiento científico que adquieren las enfermeras y los enfermeros en las escuelas universitarias de enfermería, han conquistado el título de licenciados en el ramo. Y por los riesgos para su propia salud, al atender a las personas que padecen todo tipo de enfermedades, las enfermeras y enfermeros asumen un peligro inminente para su propia salud.
El eje central de la profesión de la enfermería es el cuidado, por lo que todo profesional en este ramo, tanto enfermeras como enfermeros exponen su propia salud al dedicarse a cuidar a los enfermos, lo que los lleva a abordar aspectos de la familia de estos y del resto de la comunidad. Hay que conocer que la enfermería es la única profesión que está en todas las etapas de una persona enferma, desde su tratamiento inicial hasta la muerte. Son los enfermeros, hombres y mujeres, quienes llevan alivio al enfermo en su cama de hospital, los que le dan esperanzas al enfermo y confort al moribundo en los instantes finales de su vida.
Es inhumano y totalmente repudiable el tratamiento que le está dando el Gobierno de la Presidente Xiomara Castro al gremio de los enfermeros y enfermeras, por el hecho de estar reclamando derechos adquiridos que ahora les son desconocidos y conculcados por la Secretaría de Salud a cargo de una profesional de la medicina que con un tono altanero, con una exhibición de soberbia y arrogancia, les tira la puerta a los profesionales que cuidan de manera integral la salud de los hondureños, no solo del aspecto físico, sino también en sus aspectos emocionales, espirituales, incluso en aquellos de carácter social.
Desconocer que los enfermeros y las enfermeras cuidan de manera integral a los hondureños, dando un aporte completo de salud a las personas, solo puede provenir de funcionarios insensibles, pero tratándose de que la titular de Salud es una profesional de la medicina, lo que la hace estar a un nivel académico más alto de las enfermeras, es inaudito el desdén con que la ministra de Salud trata a las enfermeras y enfermeros.
Ante los acontecimientos que vemos en las calles, a donde los profesionales de la enfermería llevan sus reclamos, no nos queda más que ponernos del lado de las enfermeras y enfermeros, y condenar el trato infamante que les da la pequeña ministra de Salud, que aunque ha crecido en soberbia y altanería, su pequeñez humanoide que la ha llevado a autoproclamarse que ella es el Estado, hablando de «sus hospitales» como si fuera la propietaria del ramo de Salud, la retratan en cuerpo entero como otra pequeña dictadora que se cree una especie de emperatriz para atender la demanda de salud como si fuera una hacienda de su propiedad, donde todos los hondureños son sus peones.
No hay con que pagarle la entrega heroica que tuvieron las enfermeras y enfermeros junto a los médicos durante la pandemia del COVID-19, su trabajo extenuante salvó la vida a miles de personas, desempeño en el que fallecieron muchos profesionales de la enfermería al ser contagiados por el virus, como para que venga ahora el gobierno con una ministra de Salud, tan arrogante como deshumanizada, a desconocer los derechos de estos profesionales.
Siempre será insuficiente el personal de enfermería para atender la demanda de salud de los hondureños, sin embargo, el personal actual se multiplica en los hospitales y centros de salud para cumplir con una tarea que es reconocida por los ciudadanos, no así por el gobierno que no incluye como trabajo esencial el que realiza el personal de enfermería. Hoy, nuestro país tiene profesionales de la enfermería que son prestadores de servicio que entienden la importancia de la enfermería en la sociedad, desempeñando su labor necesaria, centrando su atención en las personas que requieren de su cuidado.
Aunque el Gobierno de la Presidente Xiomara Castro no parece entender la importancia del trabajo de las enfermeras y enfermeros, porque tiene al frente del ramo de salud, a una ministra que se ha dejado vencer por la prepotencia, una persona pequeña de estatura, pero con una arrogancia gigante que la ciega para no ver cuán importante y valioso es el trabajo que desempeñan las enfermeras y enfermeros en el cuidado de la salud de los hondureños.
Así son las cosas y así se las hemos contado hoy jueves 14 de noviembre de 2024.