Honduras sigue la rutina de ponerse en el ojo del mundo por los disparates de los gobernantes y los políticos, aunque, a decir verdad, en comparación con los desmanes que comete Donald Trump, lo que ocurre en Honduras, por lo minúsculo que somos en el concierto internacional, la atención que nos prestan los grandes países y las organizaciones internacionales es más por lástima que por la importancia que tenemos. Sin embargo, tras celebrarse las Elecciones Primarias, tener clavados los ojos de la unión de países europeos y del gobierno de Estados Unidos, que es lo más significativo del esquema internacional en que Honduras se desenvuelve, podría hacernos sentir que representamos algo importante a ese nivel.
Lo cierto es que las cosas son al revés, hay preocupación en la Unión Europea y en Estados Unidos, porque ven con tristeza que Honduras de nuevo se distrae por culpa de los politicos que ven en la retención o en la perpetuidad en el poder, una obsesión maligna en que para ellos nada es más importante que manejar el poder, aunque eso no signifique el bienestar de los habitantes ni el progreso del país. Una elección de carácter interno en Honduras, no debería ser tan trascendental porque las Elecciones Primarias sirven nada más para que los partidos elijan a sus candidatos, para competir en las Elecciones Generales, que es donde el país elige a sus autoridades para un nuevo mandato.
Pero, en Honduras las cosas se hacen al revés, porque pareciera que el partido que gobierna desde las Elecciones Primarias quiere dejar pavimentado el camino para ganar las generales, lo que hace que quede esparcido en el ambiente el interés de aferrarse al poder, con lo que, todos los demas que están fuera del esquema gubernamental, crean con o sin fundamento, que hay una trama orquestada para perpetuarse en el poder. En esto, el ambiente lo enrarecen todos los políticos, porque el problema es que todos, en determinado momento piensan que el poder se hizo para un determinado sector y que pueden retorcer la ley para lograrlo.
Creemos que ha llegado el momento de despejar este panorama tan sombrío de una vez por todas, pero para abrir esta posibilidad, que no sean los políticos sino la sociedad en general la que se ocupe de sentar las bases para crear una nueva normativa que establezca un esquema de organización que diseñe las directrices para proporcionarle al país una ruta que nos permita caminar hacia el desarrollo y la prosperidad. Después de más de 45 años de vida institucional los magros avances que ha tenido Honduras por la estrecha visión de los políticos, obliga a los sectores de la sociedad a ponerse al frente para evitar que, especialmente los malos políticos, sigan destrozando a Honduras, con un clima de incertidumbre invivible como el que estamos viviendo en estos momentos.
Honduras no se merece un destino tan desafortunado como el que nos deparan los políticos, porque, aunque el pueblo les da un mandato cada cuatro años, los que alcanzan la conducción del país terminan haciendo lo contrario a todo lo que deberían hacer para procurar un buen sistema de vida donde haya suficiente oportunidad de empleo para las personas y las mejores oportunidades para que los jóvenes crezcan y puedan alcanzar los mejores propósitos.
Nunca como hoy nos sentimos tan alarmados porque los que gobiernan actualmente están llenos de despropósitos que lejos de incentivarnos con metas optimistas nos entierran y sepultan el poco ánimo que nos queda, especialmente cuando una candidata que aspira a ser presidente por el partido de gobierno nos dice que el modelo que debemos aspirar en Honduras es el de Cuba, un país que se debate entre el desastre económico y la miseria, con un modelo de gobierno en donde prevalece el ánimo de perpetuarse en el poder a costa de sembrar el sentimiento destructivo en las personas, hundidas en la desesperación por abandonar la patria. Y un funcionario de gobierno que raya en la estupidez al decir que Venezuela, donde todos los ciudadanos aspiran a abandonar el país, es lo más admirable del mundo.
En este prisma bizarro donde los políticos gobernantes hacen todo al revés, de nuevo es el pueblo, el que pone la cordura y propone revertir el desorden en que nos han instaurado estos malos politicos. Por eso es que los ciudadanos salieron a votar con entereza y decisión el pasado 9 de marzo y sin duda que están dispuestos a redoblar ese interés el próximo mes de noviembre cuando toque elegir a un nuevo gobierno.
Y quizás a eso se debe que los países de la Unión Europea y el gobierno de EEUU, más por compasión que por otra cosa, han mostrado preocupación por el desarrollo de las Elecciones Primarias de los partidos en nuestro país. Y eso sin duda es un buen augurio, porque con sendos pronunciamientos de Europa y EEUU, los hondureños nos podemos sentir afortunados que las principales potencias del mundo occidental, muestren un supremo interés por ayudarnos a preservar el sistema democrático, de manera que quienes piensen en la temeridad de romper el orden constitucional, deben saber que enfrentaran graves consecuencias que les vendrán de Europa y EEUU.
Así son las cosas y así se las hemos contado hoy martes 25 de marzo de 2025.