EL FERRY NOS DEJA A LA ZAGA

El Salvador y Costa Rica han decidido ir de la mano en el crecimiento comercial de ambos países, y olvidarse del paso por Honduras y Nicaragua, donde todos los días hay mil dificultades en las aduanas que entorpecen el tráfico terrestre. Eso es lo que llevo a los gobernantes de Costa Rica y El Salvador a conversar directamente ante la imposibilidad de concertar con Xiomara Castro y Daniel Ortega, para salvar los atascos que hay en las aduanas de Honduras y Nicaragua; decidieron conectarse directamente por la vía marítima a través de un ferry, a la usanza de los países europeos, donde gran parte del comercio se transporta en ferrys y barcos cuyo tamaño les permite la navegación por los ríos que atraviesan el viejo continente.

La decisión es muy buena para los intereses económicos y comerciales de ticos y salvadoreños, pero con repercusiones muy negativas para Honduras y Nicaragua, por culpa de los gobernantes de estos países. El sistema aduanero de Honduras es un desastre y no es de ahora, pasar por una aduana hondureña, en cualquiera de nuestras tres fronteras, es un verdadero suplicio. A los que nos gusta viajar por tierra, alguna vez pasamos por estas fronteras y es de las peores experiencias de las cuales guardamos solo malos recuerdos, pero por versiones más recientes que nos llegan, las aduanas hondureñas hoy están peor que nunca. El retraso que han venido sufriendo este último ano los medios de transporte comercial que usan la Carretera Panamericana, provocaba pérdidas millonarias a las empresas guatemaltecas, salvadoreñas y costarricenses. Eso llevo a los presidentes de El Salvador y Costa Rica a crear un sistema marítimo de transporte directo, por medio del sistema ferry, una embarcación con suficiente capacidad para transportar furgones cargados de mercaderías, que en menos de 48 horas llegan al puerto destinado.

Este salto del tráfico comercial por medio de la ruta marítima condena en gran parte a la Carretera Panamericana al desuso, con la consiguiente merma de ingresos en las aduanas de Honduras y Nicaragua, al perder el tráfico de centenares de furgones que ahora llegaran de puerto a puerto, entre El Salvador y Costa Rica, a bordo de un ferry, ingresos que ya no percibirán Honduras y Nicaragua, por la indiferencia de los gobiernos de estos países, ante lo que no cabe ninguna protesta ni queja, porque El Salvador y Costa Rica están en su perfecto derecho de velar por sus intereses y no padecer por las trabas de Honduras y Nicaragua.

Ahora, se espera que el gobierno hondureño apresure la ratificación del tratado Hernández-Ortega, que garantiza la salida de Honduras a las aguas internacionales del Pacifico, gracias a la voluntad del gobierno de Ortega en favor de Honduras, pero que por un egoísmo absurdo del Gobierno de LIBRE, el tratado se mantiene engavetado en el Congreso Nacional, donde el presidente ilegal Luis Redondo ha decidido mantener en agenda solo los temas políticos y otros que convienen a los intereses del Partido LIBRE para su proyecto político.

Sin embargo, para compensar la pérdida del tráfico comercial salvadoreño, guatemalteco y costarricense, nuestro pais debe agilizar la conexión del Canal Seco para unir a Puerto Cortes y Amapala y convertirnos en la segunda salida del Pacifico al Atlántico, la segunda ruta alterna al canal de Panamá que afronta una sequía en las esclusas, lo que ralentiza el paso de los barcos. Es imprescindible que el Gobierno de Xiomara Castro salga de su propio atolladero político y atienda los negocios de Estado que son verdaderamente importantes, como ratificar el tratado firmado con Nicaragua para garantizar la salida a las aguas internacionales del Pacífico y finalizar el Canal Seco hasta Amapala.

Estas dos grandes obras de Estado le pueden dar mucho crédito al Gobierno de Xiomara Castro, que se encuentra entrampado en sus vericuetos políticos, que no tienen pies ni cabeza mientras no dé señales de dedicarse a los asuntos que generen beneficio nacional como es desarrollar los negocios que al ejecutarse traerán una derrama económica inmediata a través de la generación de empleos. 

Los presidentes de El Salvador y Costa Rica han dado una gran lección a sus colegas de Honduras y Nicaragua, al agilizar la ruta comercial marítima por medio del ferry, que será un detonante económico que se traducirá en crecimiento. Mientras en Honduras, el gobierno cada vez se hunde dando palos de ciego, arrastrando a nuestro país a un futuro incierto por las malas decisiones que trabajan en contra de la economía y por ende en contra del sacrificado pueblo hondureño.

Así son las cosas y así se las hemos contado hoy jueves 17 de agosto de 2023.