En una extensa sesión que se extendió hasta pasadas las cinco de la mañana de este miércoles, el Congreso Nacional aprobó el Presupuesto General de Ingresos y Egresos de la República para 2025, por un monto de 430,907.8 millones de lempiras, lo que representa un aumento del 5.8% respecto al año anterior. La votación, que contó con una mayoría reducida, se facilitó por la ausencia estratégica de varios diputados de oposición, lo que permitió al oficialismo impulsar su agenda.
El presupuesto, calificado como «histórico» por el oficialismo, prioriza la inversión pública y social en áreas como educación, salud e infraestructura. Sin embargo, la sesión también estuvo marcada por la aprobación en bloque de 18 adendas a contratos de energía eléctrica, un proceso criticado por la falta de transparencia y análisis individual. Aunque el oficialismo asegura que estas adendas generarán ahorros anuales de más de 2,295 millones de lempiras, expertos y opositores advierten sobre posibles irregularidades y su impacto negativo en los consumidores.
La jornada legislativa dejó en evidencia las tensiones políticas, con una oposición fragmentada y cuestionamientos sobre la transparencia en la distribución de recursos y la aprobación de contratos clave sin mayor debate. Con esta decisión, el gobierno asegura la continuidad de sus programas, pero también abre un debate sobre el manejo de los fondos públicos y los intereses en juego.