Madrid, España.
El Real Madrid cerró el ejercicio económico 2022-23 con un resultado positivo de 12 millones de euros e ingresó 843 millones, sin contar los traspasos de jugadores, según informó el club blanco tras la reunión de su Junta Directiva en la que se analizaron las cuentas anuales del pasado curso.
En fútbol, logró los títulos de Supercopa de Europa, el Mundial de Clubes y la Copa del Rey, mientras que la sección de baloncesto sumó la Euroliga y la Supercopa de España, unos logros que han su reflejo «en mayores ingresos», pero también en mayores gastos por las primas a los deportistas y el mayor número de partidos disputados.
Los ingresos, sin contar los logrados por los traspasos de jugadores, en el ejercicio 2022-23 fueron de 843 millones de euros, 121 millones, un 17 por ciento, más que en el anterior 2021-22. A excepción de los ingresos por competiciones, dado que en 2021-22 ganó la Liga de Campeones, todas las restantes líneas de negocio han registrado crecimiento, en especial las de marketing y del estadio, afectada estos últimos años por las restricciones de aforo por la COVID-19.
En 2022-23, a pesar de las secuelas aún por la pandemia y de las limitaciones de aforo en el estadio por las obras de remodelación en curso, el Real Madrid superó, por primera vez, la cifra de ingresos previa a la COVID (757 millones de euros en 2018-19).
Los ingresos del estadio, debido a las obras, aún han sido un 13 por ciento inferiores a los de 2018-19, pero los ingresos de las restantes líneas de negocio ya han superado significativamente los que se lograron en 2018-19, destacando en especial los de marketing (un 12 por ciento más).
El valor de la ratio en el ejercicio 2022-23 se ha situado en un 54 por ciento, muy por debajo del valor del 70 recomendado por la Asociación Europea de Clubes, y obtuvo un EBITDA por valor de 158 millones de euros.
En el caso de los traspasos de jugadores, constata una mayor dificultad de realizar operaciones de traspasos de cuantía significativas tanto por las enormes pérdidas incurridas por la mayoría de los clubes europeos por la COVID-19 como por la propia evolución de la dinámica del mercado de transferencias con una creciente cantidad de jugadores que acaban contrato sin ser traspasados.
El beneficio después de impuestos es de 12 millones de euros en 2022-23 frente a los 13 millones en 21-22 en un contexto económico caracterizado por pérdidas generalizadas en la gran mayoría de clubes europeos en el período 2019-20 a 2021-22 gracias a «medidas de contención de gasto y de mejora de negocio en todos los ámbitos».
Como consecuencia de los beneficios, el Real Madrid ha incrementado el valor de su patrimonio neto hasta alcanzar, al 30 de junio de 2023, un valor de 558 millones de euros, 25 millones más que en junio de 2019 a pesar de la crisis por el coronavirus y del inicio de las obras de remodelación.
El saldo de tesorería, a 30 de junio de 2023, excluida la tesorería del préstamo del proyecto de remodelación del estadio, es 128 millones de euros. Además de dicho saldo, el club blanco dispone de pólizas de crédito sin disponer por importe de 265 millones de euros. «Estas disponibilidades financieras permiten afrontar con holgura los compromisos de pago previstos», apuntó la entidad en un comunicado.