
El presidente estadounidense, Donald Trump, solicitó este martes al Congreso, durante su discurso ante una sesión conjunta del legislativo, que apruebe la orden ejecutiva que firmó para imponer la pena de muerte a quienes asesinen a un oficial de Policía en el país. La medida, titulada «Restaurar la pena de muerte y proteger la seguridad pública», fue firmada el 20 de enero, el mismo día en que Trump asumió nuevamente el cargo de jefe de Gobierno y Estado. El mandatario enfatizó la importancia de esta política para garantizar la seguridad pública y proteger a los agentes del orden, quienes enfrentan riesgos constantes en el ejercicio de sus funciones.
Durante su intervención, Trump recordó casos de policías asesinados por individuos con extensos historiales delictivos, subrayando la necesidad de actuar con firmeza. «Ya firmé una orden ejecutiva que exige la pena de muerte obligatoria para cualquiera que asesine a un policía», declaró. Además, criticó la reincidencia de delincuentes violentos, mencionando casos de personas con decenas de arrestos que continúan cometiendo crímenes atroces. «Para sacar a estos asesinos a sangre fría y reincidentes de nuestras calles, vamos a hacerlo rápido», afirmó, destacando la urgencia de implementar medidas contundentes para proteger a la ciudadanía y honrar a los agentes caídos.