El expresidente de Uruguay, José «Pepe» Mujica, de 89 años, anunció este jueves que el cáncer de esófago que padece se ha extendido al hígado, y aseguró que no recibirá más tratamientos médicos. En una emotiva entrevista con la revista Búsqueda, Mujica expresó su decisión de no continuar con los procedimientos que ya no puede tolerar debido a su avanzada edad y su salud deteriorada por enfermedades crónicas. «Mi cuerpo no lo aguanta», dijo, reconociendo que no seguiría con la radioterapia ni una posible cirugía. El exmandatario, quien está en proceso de recuperación tras la colocación de un stent para mejorar su esófago, se encuentra en su chacra de Montevideo, donde busca tranquilidad en sus últimos días, rodeado de su esposa, Lucía Topolansky, y sus seres queridos.
Mujica, que fue presidente de Uruguay entre 2010 y 2015, ha enfrentado una batalla contra el cáncer desde principios de 2024, cuando se detectó un tumor en su esófago. A pesar de someterse a 31 sesiones de radioterapia, su recuperación fue lenta debido a complicaciones asociadas a su edad y otras condiciones médicas preexistentes. En su mensaje, pidió que lo dejaran tranquilo y que no se le exigieran más entrevistas, asegurando que su ciclo de vida había llegado a su fin. El expresidente afirmó que desea ser enterrado en su chacra, junto a sus seres queridos y su mascota, Manuela, y se despidió con una reflexión sobre su legado político: «Soy un anciano que está muy cerca de emprender la retirada, pero soy feliz porque están ustedes».