El sacerdote jesuita Ismael Moreno, conocido como el padre «Melo,» lanzó una dura crítica a la clase política de Honduras, afirmando que el narcotráfico y la corrupción se han vuelto atributos de liderazgo. En su cuenta de X, señaló que los políticos vinculados a actividades ilícitas no solo evitan el desprestigio, sino que refuerzan su estatus al amparo de estas prácticas, reflejando una profunda decadencia política.
Moreno destacó que en Honduras “no hay escándalo que asuste más de tres días”, sugiriendo que las denuncias de corrupción no tienen un impacto duradero en la percepción pública. Criticó la falta de consecuencias para los implicados en escándalos de alto perfil y expresó su preocupación por las próximas elecciones, advirtiendo que el país se dirige a las urnas sin reformas significativas para un sistema electoral más justo. En un contexto donde la sociedad exige cambios estructurales y mayor transparencia, las declaraciones del padre Melo resuenan como un llamado urgente a la acción en un país atrapado por el poder de las élites políticas.
No hay escándalo que asuste más de tres días. Ser político narco o en actos de corrupción, no asusta. Siempre será líder, más por narco, por corrupto o por vividor que por político. Es decadencia de la política. Al menos, vamos a elecciones. Sin reformas, claro…
— Ismael Moreno (@Melosjmoreno) October 30, 2024