CACAO JUDICIAL

El fiscal general Johel Zelaya, en medio de un inocultable nerviosismo, anunció este día que el Ministerio Público citará a declarar a las personas que fueron mencionadas en el juicio contra Juan Orlando Hernández en la Corte del Distrito Sur de Nueva York, entre los cuales está el coordinador de gobierno, expresidente Manuel Zelaya Rosales, su hermano el diputado Carlos Zelaya, el exalcalde de Choloma, Polo Crivelli, el expresidente Pepe Lobo, incluso el presidente del CCEPL, Yani Rosenthal. Aquí todos sabemos de qué pata cojea el fiscal Johel Zelaya, por lo que el llamamiento a la citación pareciera más bien tener el fino propósito de brindar una especie de protección a los mencionados, en la eventualidad de que, en los próximos casos que se ventilen en aquel celebre tribunal de NY, haya razones para encausar una posible extradición para algunos de los mencionados.

En la Escuela de Leyes llamábamos «cacao judicial», para el caso, cuando existiera la posibilidad de que una persona sea pedida en extradición por las autoridades de EEUU, si tuviera pendiente en un tribunal hondureños una causa que se le sigue, esta tiene prioridad sobre cualquier pretensión de autoridades extranjeras. Como no se sabe si en los juicios que habrán de celebrarse próximamente en Nueva York se vincula a algunos de los mencionados durante el juicio contra JOH, una forma de resguardarse es creando un procedimiento legal en su contra en Honduras, que los blinde de un posible pedido de extradición.

Vea el público como se juega con el marco legal para protegerse, en este caso en que el fiscal general Johel Zelaya anuncia en un visible estado de nerviosismo, que citara a determinadas personas, no es para adelantarse a la Corte que preside el juez Kevin Castel y deducir responsabilidades a los hondureños en el suelo patrio. Es una coartada estupenda que les sirve a los mencionados en la Corte del Distrito Sur, en caso de que, en el desarrollo de los expedientes, una de las cuales fue mencionada durante los interrogatorios que hacían los abogados de JOH, y que fue censurado por el juez Castel y el fiscal de NY, con la advertencia de que el caso del zar antidrogas, Arístides Gonzales, todavía estaba en investigación.

Todos sabemos que tanto el Poder Judicial como el Ministerio Público presidido por el fiscal Johel Zelaya están sumidos en un carajal y rodeado por un circo partidario que gobierna. Este modelo de protección de incoar alguna acusación en Honduras contra las personas mencionadas en NY, es para protegerlos de un eventual pedido de extradición, porque mientras estén sometidos a un encausamiento en un tribunal hondureño, cualquier pedido de extradición de EEUU pasa al refrigerador. Por supuesto que a nadie se le ocurrirá en Honduras dar un pucherazo por este paso de protección, porque todo está dentro del marco de la ley. Y la ley hondureña está por encima de la ley extranjera, cuando se trata de castigar al delincuente.

El ciudadano Ramon Mata Ballesteros en su momento se acogió a este marco, una vez escapado de una cárcel de seguridad de Colombia, pidió que se le juzgara en Honduras y como aquí no tenía acusación alguna, obtuvo su libertad hasta el día que un operativo de la DEA lo secuestró y se lo llevó a EEUU, fuera de todo marco legal. La cosa hoy es diferente, el fiscal Johel Zelaya ha tomado la iniciativa, convocando a los mencionados en el juicio contra JOH y aunque esto no significa la apertura de un juicio, por el hecho de ser un llamamiento del fiscal general pone a los mencionados bajo el fuero del Ministerio Público, con lo cual obtienen «el cacao judicial», es decir, la protección especial de la fiscalía general por lo que una orden de extradición pasa a segundo plano.

Esto es pura inteligencia, un paso brillante de los abogados que ya trazaron el mapa para evitar que alguno de los mencionados en el juicio de NY contra JOH, pudiera ser solicitado en extradición, y no es el primer caso en Honduras, ya hubo otro pedido de extradición que no pudo ejecutarse, porque el solicitado tenía un juicio pendiente por un delito comercial. En cuanto al caso de Yani Rosenthal, mencionado por el fiscal Johel Zelaya, es extraño que se le convoque, porque Yani Rosenthal asumió su responsabilidad por una falta imputada, ya pago una pena y obtuvo su libertad. La mención que se le hiciera en la Lista Engel pareciera tener una advertencia de EEUU, pero hasta allí, pero no significa que haya causa de persecución. Yani Rosenthal ya no tiene causa pendiente en los tribunales de EEUU, por lo que el llamamiento que le ha hecho el fiscal no tiene sentido. El cacao judicial en todo caso es para proteger a Mel Zelaya y su hermano Carlos, implicar a Yani Rosenthal en la citación pareciera ser un distractivo, una especie de cortina especial para que no se diga que solo se cita a dos miembros poderosos del Partido LIBRE. 

De todas maneras, en Honduras no hay causas abiertas contra ninguno de los mencionados en el juicio de NY, por lo tanto, aquí no ha pasado nada. Es en la Corte del Distrito Sur de NY donde se hicieron las menciones de las personas y donde pareciera que seguirán mencionando nombres una vez que el compulsivo juez Kevin Castel, obstinado en llevar delincuentes a las cárceles de EEUU, empiece a desarrollar otros juicios donde están implicados más hondureños en el delito más perseguido por las leyes y las autoridades de EEUU. De manera que lo que está haciendo el fiscal Johel Zelaya es anticipando protección, pá por si acaso.

Así son las cosas y así se las hemos contado hoy martes 6 de agosto de 2024.