En los últimos días, imágenes satelitales han revelado la construcción de un muro por parte de Corea del Norte a lo largo de la Zona Desmilitarizada (ZDC), una franja que separa las dos Coreas desde el fin de la Guerra de Corea en 1953. Este muro, visible en el extremo oriental fronterizo, se extiende aproximadamente por un kilómetro y parece estar destinado no solo a propósitos defensivos, sino también a dividir áreas específicas del territorio. Expertos han señalado que esta acción podría constituir una violación del acuerdo de tregua que ha mantenido la relativa paz en la península coreana durante décadas.
La revelación de estas imágenes ha generado preocupación internacional y ha intensificado las tensiones ya elevadas entre Corea del Norte y Corea del Sur. En particular, la designación por parte de Kim Jong-un de Corea del Sur como su «principal enemigo» ha agregado un componente de hostilidad adicional a la situación. Además del muro, las imágenes también muestran signos de limpieza de terrenos en el lado norcoreano de la ZDC, así como la construcción de caminos recientes, indicativos de un esfuerzo continuo por parte de Corea del Norte para fortificar su frontera y reforzar sus defensas.
Uk Yang, experto en defensa del Instituto Asan de Estudios Políticos de Seúl, ha comentado que estos muros no parecen ser simples obstáculos antitanques, como los construidos en décadas anteriores, sino estructuras diseñadas para dividir y controlar el acceso a áreas específicas. Esta nueva infraestructura plantea desafíos significativos para la estabilidad regional, especialmente en un contexto donde las relaciones intercoreanas son frágiles y cualquier escalada podría tener consecuencias graves para la seguridad en la región y más allá.