Atlanta, Estados Unidos.
Donald Trump se presentará este jueves en una cárcel de Atlanta para enfrentarse a los cargos derivados de los planes para anular su derrota en las elecciones de 2020, en el cuarto caso penal de este año contra el expresidente republicano de Estados Unidos.
Al igual que otros acusados en Atlanta, Trump tendrá que comparecer en la cárcel del condado de Fulton para que le tomen las huellas dactilares y lo fotografíen. Es probable que la imagen de su ficha policial sea ampliamente difundida tanto por partidarios como por detractores en su campaña para recuperar la presidencia en las elecciones de noviembre de 2024.
Se espera que el republicano quede en libertad después de que el personal penitenciario le haya tomado las huellas y la foto, y tras depositar los 200.000 dólares de fianza acordados con la Fiscalía.
Esta es la cuarta imputación penal de Trump, pero la primera en que se le cita en una cárcel y también la primera que se le toma una foto policial. En las tres anteriores, había comparecido en diferentes juzgados para la lectura de cargos.
Trump enfrenta 13 cargos por delitos graves, incluido el de asociación ilícita (ley RICO en inglés), que suele utilizarse para perseguir a las mafias de crimen organizado, por presionar a funcionarios estatales para que revirtieran su derrota electoral en Georgia ante el presidente demócrata Joe Biden. Fue acusado tras una investigación dirigida por el fiscal de distrito del condado de Fulton, Fani Willis.
Trump, de 77 años, negó haber cometido delito alguno y dijo que esta causa penal, así como las otras tres, tienen motivaciones políticas. En todas se declaró inocente.
Una de las principales pruebas en su contra es la grabación de una llamada de enero de 2021 en la que pidió al secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, que le “encontrara” 11.780 votos, uno más de los que había conseguido Biden.
Al menos nueve de los 19 imputados en esta supuesta trama mafiosa ya se han entregado en la prisión de Fulton y han salido en libertad tras pagar sendas fianzas. Ayer lo hizo el exabogado de Trump y ex alcalde neoyorquino Rudy Giuliani, quien tuvo que pagar 150.000 dólares para salir libre.
El exmandatario aceptó condiciones de libertad bajo fianza que le prohíben amenazar a testigos o a sus 18 coacusados en el caso. El miércoles, Trump incorporó a su equipo legal al abogado de Atlanta Steven Sadow, según una presentación judicial.
Según la CNN, Drew Findling, el abogado que ha llevado la defensa de Trump en este caso, será sustituido por Sadow, un profesional con despacho en Atlanta cuya web le define como un “asesor legal especial para la defensa de delitos de guante blanco y casos de perfil elevado”. Una fuente cercana a Trump explicó a la misma cadena que no se trata del desempeño de Findling, mientras otra justificó el cambio porque Sadow es “el mejor abogado defensor de casos penales de Georgia”.
La Administración Federal de Aviación ordenó el cierre del espacio aéreo sobre la prisión a partir de las 18.45 (hora local, 22.45 GMT). La cárcel tiene una reputación de condiciones sombrías que han inspirado canciones de rap y provocado una investigación del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Seguidores esperan por él
Un numero creciente de partidarios de Trump, algunos con banderas, se reunieron fuera de la cárcel esperando su llegada.
“Estoy aquí porque estoy horrorizado por lo que está pasando”, dijo Bob Kunst, de 81 años, un jubilado que dijo que había conducido desde Miami Beach y se quedó fuera de la prisión con un cartel casero que decía “Encierren a Biden”.
Trump convocó protestas en todo el país después de su primera acusación penal en Nueva York en marzo, lo que provocó temores de disturbios violentos similares al ataque del 6 de enero de 2021 en el Capitolio de Estados Unidos por sus partidarios.
(Con información de EFE y Reuters)